miércoles

¿De qué modo decírtelo? ¿Compararé tus ojos a las quietas estrellas de la noche? ¿O, utilizando resabiadas metáforas de Oriente, diré que hay en tus labios imposibles y blancas margaritas, que tu talle es una esbelta palma? Mentiría de una manera estúpida: bien sabes que eres poquita cosa y, desde luego, nada del otro mundo. Sin embargo, cuando no logro verte, algo me pasa que no puedo aguantarme ni yo mismo.

Victor Botas.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio